La OPEP ha revisado al alza sus expectativas de demanda mundial de petróleo para 2023, situándola en 102.11 millones de barriles diarios (bpd), atribuyendo este aumento a parámetros de mercado sólidos. Para 2024, la estimación se mantiene alta en 104.36 millones de bpd. China y la India se perfilan como impulsores clave de esta tendencia, y se espera que la oferta de petróleo en países no pertenecientes a la OPEP aumente significativamente en los próximos años.
En octubre, la producción de la OPEP alcanzó los 27.9 millones de bpd, con Irán y Angola aumentando su producción, mientras que Libia, Arabia Saudita y Kuwait la redujeron. A pesar de esto, la producción real de los países de la OPEP sigue por debajo de las cuotas establecidas, debido a restricciones voluntarias.
Rusia, uno de los principales actores en la industria petrolera, aumentó su producción en septiembre, posicionándose en 10.8 millones de bpd, con una previsión mejorada para 2023. El país tiene la intención de adherirse a la limitación de suministro de 300,000 bpd para fines de 2023. En septiembre, Rusia representó cerca del 19% de las importaciones totales de petróleo de China y el 36% de las importaciones de la India, consolidándose como un proveedor clave para ambos países.
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